invocación
que por favor me hables
en qué abandono me pusiste
en qué olvido me dejaste
desarticulado
impreciso
vacío
de ninguna excepción
me dejaste
la mano del oficio
el blanco expectante
y un pájaro
sólo inefable
háblame noche
que por favor me hables
háblame noche
los versos dame.
mi
furia más estricta es el silencio
una
enemistad de tortuga
soy
un calamar que hace
una
explosión de tinta
para
esconderse en lo oscuro
es
monstruoso habitar
todas
mis imposibilidades
intento
respirar en el fondo
corro
delante de un tren
si
me detengo, me arrolla
el
amor puro y su dolor puro
mi
corazón de fuego
trémolo
con su llamita
huérfano
en
el viento
aguardando
tu ardor
como si nada
de lo que dijeras
de lo que hicieras
de lo que
pudieras ser
porque ya se
cabalmente que
nada
puede
nada
esconde
nada
cambia
nada puede
romper
lo
que te quiero
En la oscuridad
esta ósea luz te afila
tanto la espalda q duele,
me hundo al lado
de un barco magnífico
que emerge y ni piensa
en arrojarme un salvavidas,
quiero decir, subirme
esta ósea luz te afila
tanto la espalda q duele,
me hundo al lado
de un barco magnífico
que emerge y ni piensa
en arrojarme un salvavidas,
quiero decir, subirme
o llevarme o retenerme
en cubierta
Porque ya no es
la razón, ni la culpa,
ni el desarrollo.
Es todo lo que duerme
a brazos cerrados.
ni el desarrollo.
Es todo lo que duerme
a brazos cerrados.